Nos despertamos a las 8:00 am, me hubiese levantado mas tarde pero frió ya no lo aguantaba mas, necesitaba moverme, ademas debíamos comenzar a hervir agua para desayunar y llevar para el trayecto de vuelta, la única fuente de agua que teníamos era la laguna la contiene aguas solamente de deshielo y se encuentran estancadas. Luego de desayunar, hervir agua, lavar todo, limpiar el lugar y darnos un shapuson despertador (10 segundos en el agua, no pude aguantar mas), comenzamos nuestro retorno a eso de las 11:30 am, esta vez bajamos por la parte oeste del cerro, sendero serpenteaba por las laderas del cerro las cabras y luego continuaba por el filo del cerro. El sendero es muy cómodo, bien marcado y bajo riego de accidente; una vez pasado el filo bajamos hacia un bosque bien espeso en donde a mitad de camino nos encontramos con un estero, nos bañamos, llenamos nuestras botellas, comimos un poco y seguimos nuestro retorno. Llegamos al valle a eso de las 4:00 pm.
Conclusión:
El trayecto que hicimos de vuelta es muy entretenido y se puede observar una vista al valle hermosa, a demás no presenta mayores riegos de accidentes. En cambio, el trayecto de ida presenta una pendiente bastante inclinada, piedras sueltas, por lo tanto un mayor riesgo de accidente, pero la ventaja es que es mas corto y se realiza en menos tiempo, a demás que da la posibilidad de poder conocer el refugio abandonado Shangri-La, el cual se convirtió en un atractivo mas cuando se pensó en este viaje.
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